La actitud sospechosa de Andrade escondiéndose de efectivos de la Policía despertó la atención del conductor, quien hizo uso de la red de apoyo de la Policía y taxistas.

Los cuadrantes 20 y 22 de la Policía Metropolitana, adscritos a la estación Centro, custodiaron el vehículo hasta el barrio La Cartagena, donde Andrade, luego de pedirle al taxista detener el vehículo procedió a arrebatarle su teléfono móvil.

En una rápida acción Andrade fue capturado, logrando la recuperación del teléfono marca Motorola, avaluado en un millón de pesos.

De igual forma, al sindicado se le incautó otro celular, marca LG, que aparece reportado por hurto el pasado 7 de abril.

La sustracción, cometida en el barrio El Bosque, tuvo como protagonista a otro conductor de taxi.