Diez años de impunidad por muerte de estudiante

Tomadas de video - el nuevo día
Una familia de Líbano norte del departamento hoy sigue pidiendo justicia por la muerte de uno de sus integrantes, presuntamente por culpa de un agente del Esmad de la Policía.

Hace 10 años Ana Benilda Ángel Orjuela por poco enloquece porque el dolor más grande que sintió fue cuando se enteró que su hijo Óscar Leonardo Salas había muerto. Los tolimenses habían viajado a la capital de la república para que el joven se preparara como profesional.

Ellos son del Líbano, Tolima, y el 8 de marzo de 2006 Óscar Leonardo Salas salió de su casa rumbo a la universidad Distrital donde estudiaba lingüística, pero ese día un grupo de alumnos protestó contra el Tratado de Libre Comercio, TLC.

Ese día sería el más doloroso para la familia Salas Ángel, porque en medio del enfrentamiento entre estudiantes e integrantes del Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, y en medio del enfrentamiento lanzaron ‘papas bombas’ y granadas lacrimógenas.

En medio del desmán un elemento impactó un ojo de Salas y debido a eso falleció.

La progenitora del joven le dijo a EL NUEVO DÍA que dejaron pasar dos meses para poder entender lo ocurrido: “Luego denunciamos al Estado y a la Policía, pero el primer año el caso no tuvo mayores avances. Además, desaparecieron muchas de las pruebas”.

Tiempo después el fiscal del caso archivó el proceso contra la Policía, pero un año y medio aproximadamente después del caso apareció un testigo, era un uniformado que perteneció al Esmad.

El agente dijo a Noticias Uno, que “armaron el escuadrón y el señor mayor Rafael Méndez dijo súbanse con todos los ‘juguetes’, eso significa las recalzadas”.

Las recalzadas, eran granadas lacrimógenas recargadas artesanalmente con elementos convirtiendo dichos elementos no convencionales.

De acuerdo con el dictamen de Medicina Legal el tolimense fue impactado por una bola de cristal.

En la entrevista que entregó el testigo aseguró que el día de los hechos escuchó por el radio de la Institución que tenía un suboficial que se detuvieran porque habían impactado a un estudiante.

Un alto oficial ordenó recoger todos los elementos para que en la investigación la Fiscalía no encontrara nada, aseguró el uniformado nombrando a un General de apellido Ruiz.

El caso nuevamente fue abierto, pero en la actualidad no han tenido noticias para dar con los responsables del caso.

Ana Benilda Ángel, quien fue amenazada junto a su familia salió de Bogotá: “Me invitaron a los Estados Unidos para hablar con algunas personas y denunciar mi caso en otras instancias”, afirmó.

Credito
EL NUEVO DÍA

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