Ante la Fiscalía General de la Nación fue denunciado un caso por el presunto hurto de unos elementos usados por una estudiante de odontología de la universidad Antonio Nariño, la situación habría ocurrió al interior del plantel en el área esterilización.

Dania Peralta, estudiante de Sexto semestre, al parecer no sería la única afectada con la irregularidad por lo que decidió asistir a la Fiscalía donde contó que el pasado 27 de octubre entregó 10 bolsas de instrumentos para esterilización en la clínica.

Cuatro días después, Peralta fue a reclamar el instrumental antes relacionado y según el relato de ella: “me entregaron nueve bolsas, me dijeron que no fuera a decir nada a los directores de la clínica, como es la decana y el director de la clínica, porque al final de la clase me solucionaban el problema y no me respondieron por nada. Le informe a la doctora de clínica y ella me dijo que bajáramos a hacer el reclamo, estando allí ellas (las encargadas de recibir el material), dijeron que yo había dicho que se me había perdido otra bolsa de menor valor, alterando el registro del instrumental para que me hubieran verificado las 10 bolsas, pero la bolsa que aparecía en el registro nunca fue entregada ya que se verificó, siento una operatoria y no una endodoncia”.

La estudiante aseguró que el 5 de noviembre radicó un derecho de petición en la universidad en el que informaba la inconformidad y la pérdida del material.

En la queja ante el ente acusador, la joven aseguró que no sólo era con ella, sino con otros compañeros de quienes aportaba sus firmas.

El material que asegura Peralta no le fue regresado, tiene un costo de al menos tres millones de pesos.

Ante la queja EL NUEVO DÍA dialogó con otros estudiantes, uno de ellos aseguró que no pudo ir a una clase o clínicos como ellos indican y “me entregaron rota la caja con el candado y notó que le faltaban algunos materiales”.

La estudiante, quien evitó dar su nombre por alguna represalia, aseguró que ante la falta de solución compró una nueva: “Eso pasa con otros compañeros o le entregan los de otros cuando no encuentran los de uno”.

Otra situación que se conoció fue la de Gustavo Romero, estudiante, quien dijo: “A mi me quemaron un instrumental con el que atiendo a los pacientes. Ese mismo día fui donde la coordinadora de clínica y me dijo, ‘vamos a solucionar el problema’, bajamos a la clínica y la solución fue limpiarlos”.

Respuesta de la Universidad Antonio Nariño

EL NUEVO DÍA dialogó con Alicia Fernández Bernal, coordinadora del programa de Odontología de la universidad Antonio Nariño, quien dijo: “Básicamente la universidad sede Ibagué, tiene el deber de recibir todos los reclamos de los estudiantes no sólo de esta situación, sino de cualquier otra. El conducto regular es enviar las quejas a la oficina jurídica en Bogotá. Esta circunstancia en particular está teniendo ese manejo y por ahora nos toca esperar la respuesta”.

Con relación a la queja de los elementos quemados la profesional indicó: “En los procesos de esterilización a veces ocurren eventualidades que no son predecibles y el asunto no es que se queme el instrumental, se quema es el papel de vinil en el cual ellos meten los elementos para esterilizar. Ese papel es el que se quema y queda pegado en el instrumental”.

Fernández, aseguró con relación a ese caso, que le dijeron al estudiante que pasara la carta y hasta el momento no ha hecho nada: “Es un estudiante de 300 que hay en la universidad y 200 en la clínica”.