Sin embargo, a través de un correo hicieron llegar a EL NUEVO DÍA copia de la querella interpuesta en la Sala de denuncias de la Estación Centro de la Policía Metropolitana de Ibagué.

Andrés Eduardo Cuenca Vera, de 40 años, denunciante, se desempeña como servidor público, contó en detalle lo que sucedió aquel 2 de mayo a las 6:30 de la tarde.

“Me encontraba en el Club Campestre, ubicado en la carrera 20 Sur número 120-14 en la celebración de San Pedro en la plaza de toros donde estaba junto a mi esposa, Alexandra Rocha y unos amigos, Óscar Mariño y su esposa Carolina Polanco. Cuando un señor de nombre Rafael Hernando Herrera Contreras iba a subir a unos niños donde estábamos nosotros sentados, pero no había espacio”.

Según el quejoso, Herrera Contreras, arrojó unas botellas que estaban en la parte posterior del palco: “le dijimos que no fuera grosero, que no era la forma de arrojar el envase al piso. Al final el señor subió a dos niños cerca donde estábamos sentados y todo terminó ahí”.

Pero todo no terminó ahí, como lo creyó Cuenca Vera. Después de ver la corrida de toros, fueron al salón principal donde había una orquesta: “con mi esposa y mis amigos estábamos en una mesa departiendo y fui en varias oportunidades al baño y me di cuenta, cuando Óscar Mariño, mi amigo, iba para el baño y lo siguió Herrera junto a otras personas”.

La víctima, manifestó que quiso evitar un problema, pero estando en el baño: “Llegaron aproximadamente 10 personas que estaban con Herrera. Nos taparon la salida y un sujeto me pegó un puño y me incrustó la gafa en el ojo izquierdo”.

Cuenca Vera señaló que lo tumbaron al piso y le pegaron patadas y lo mismo ocurrió con su amigo.

“Sin poder defendernos, llegaron los encargados de la seguridad del club y las personas que nos pegaron salieron”, indicó.

Uno de los vigilantes llevó al herido a la ambulancia que estaba en lugar, porque Cuenca tenía sangre en la cara.

Luego de ser atendido por los paramédicos, los encargados de la seguridad le pidieron a Cuenca que debía retirarse del club.

Él llamó a la Policía y los uniformados ingresaron al lugar, pero los vigilantes no los dejaron ingresar al salón de eventos, porque supuestamente los agresores estaban armados y “podría haber una balacera”.

Los presuntos agresores fueron:

Rafael Hernando Herrera, Alfredo Murra, Jorge Enrique Silva Valderrama y David Betancourt, hijo de Olga Beatriz González, actual precandidata al Senado por el partido Liberal.