Con la ventaja de ser favorito y haber logrado un empate 1-1 en la ida, recibe al meritorio equipo ecuatoriano, que busca una nueva hazaña en la final de la Libertadores 2016.

Los paisas fueron el mejor equipo de la fase de grupos, sólo han perdido un partido de los 13 que ha disputado en la Copa y está invicto en casa con cinco triunfos y un empate, por eso el conjunto cafetero, apoyado por más de 40 mil espectadores, buscará consolidar su gran campaña en el certamen continental y armar la fiesta en el estadio Atanasio Girardot, donde espera imponerse en el juego definitivo que comenzará a las 7:45 de la noche.

El conjunto dirigido por Reinaldo Rueda dispondrá de lo mejor que tiene en su amplia nómina, la única duda en su alineación será la presencia o ausencia del venezolano Alejandro Guerra, otro de los baluartes del equipo, pensando en ocupar el lugar de Sebastián Pérez, suspendido por acumulación de tarjetas amarillas.

La otra opción para ocupar el puesto de Pérez es Diego Arias, con características más de marca para acompañar a Alex Mejía. Por lo demás, Rueda no tendría más variantes y repetiría la nómina que le dio el empate 1-1 de la ida en Ecuador.

Los ecuatorianos, por su parte, llegaron desde el lunes a Medellín para preparar el juego final. El director técnico uruguayo Pablo Repetto esperará hasta último minuto al delantero José Angulo, quien presentó un esguince de tobillo en el juego de la ida y está en recuperación.

Cerca de mil 500 aficionados ecuatorianos llegarán al estadio Atanasio Girardot para el juego en el que esperan otra hazaña de Independiente del Valle, que viene de eliminar al mexicano Pumas y los argentinos de River Plate y Boca Juniors, así como al Atlético Mineiro, Colo Colo y Melgar en la fase de grupos, además del Guaraní en el repechaje inicial.

El juego será dirigido por el árbitro argentino Néstor Pitana asistido por sus compatriotas Ezequiel Brailovsky y Ariel Scime.