PUBLICIDAD
Aprovechando las fiestas navideñas, con un sigilo propio de criminales, se otorgó el 19 de Diciembre de 2019 una licencia ambiental en CORTOLIMA, para explotación minera, yendo contra la vida, el agua y por supuesto contra la participación ciudadana, derecho consagrado en la constitución en los artículos 79 y 80; esta licencia se expidió en el municipio de Ataco, para la exploración y explotación de oro en inmediaciones del río Saldaña, El permiso para el aprovechamiento de un yacimiento de minerales de oro y sus concentrados, se desarrollará en las veredas Ambulo y Balsillas, en los municipios de Ataco y Chaparral, respectivamente, en una extensión de 374 hectáreas y 151 metros cuadrados para la ejecución del proyecto que tendría una vida útil de 25 años, allí mismo, la corporación ambiental, tiempo atrás ya había negado a tan solo un kilómetro de este mismo proyecto, con argumentos, que indicaban que ese proyecto, no respetaba ni la ronda hídrica, menos la cota máxima de inundación del río Saldaña, lo que por supuesto podría hasta afectar, la infraestructura de la vía Coyaima Ataco, es decir a todas luces un proyecto abiertamente inviable e ilegal.
Cuando se anunciaba vida, en navidad del año pasado, la dirección anterior de Cortolima, firmaba sospechosa y afanosamente antes de irse, la muerte y afectación ambiental, de un territorio que reclama como nunca, una mayor presencia del estado, que mejore sus condiciones y calidad de vida, potenciando su vocación agrícola, donde son líderes cultivos como el café y el cacao, trabajo que adelantamos con determinación y que esperamos continúe el actual gobierno departamental.
Ahora nos toca a los coherentes, a los que hablamos con hechos y verdades, impetrar las revocatorias, nulidades, ante los estrados judiciales, todo lo que sea necesario y por supuesto, alentar la lucha social, contra semejante crimen, “El crimen de Ataco”.
Comentarios