Familia de La Pola pide tomar acciones para destapar una caja de aguas negras

HÉLMER PARRA - EL NUEVO DÍA
Un verdadero calvario padecen hace 10 días José Luis Velásquez y Álvaro Guzmán, quienes habitan en la carrera Cuarta No. 1N-180 y 188 del barrio La Pola parte alta, por el sellamiento que efectuó Ramiro Valderrama Lozada de la caja de aguas negras que recoge los desechos de las tres estructuras.

De acuerdo con Velásquez, se ha convertido en un problema de salubridad, ya que las aguas servidas escurren por las paredes de sus viviendas sin que la Inspección Ambiental del barrio Belén, la Defensoría del Pueblo y la Personería local les presten colaboración.

El objetivo radica en que el señor Lozada, de quien dicen vendió hace unos 25 años los derechos para que las aguas negras fueran depositadas en la caja que reposa en la edificación del mismo, sea reabierta.

El problema, según el quejoso, es que la Inspección Ambiental en fallo del 19 de noviembre de 2013 ratificó la resolución del 20 de agosto de ese año, y les ordenó sacar el sistema de aguas residuales a la calle Primera interior 194 e independizar la red.

Sin embargo, para los afectados es imposible dar cumplimiento al fallo, puesto que las acometidas de esta calle son independientes y pertecence al acueducto comunitario del sector y no al Ibal.

En los argumentos expuestos en la querella interpuesta por Valderrama Lozada se da claridad a que la caja de aguas negras que está en su vivienda (carrera Cuarta No. 1N-174) está agrietada, razón por la cual padece de humedad y olores fétidos que impiden que los inquilinos a los cuales arrienda la vivienda permanezcan mas de dos meses en la misma.

Sin embargo, los hoy afectados argumentan que no es verídico y que, por el contrario, se les ha ocasionado un perjuicio para él y sus familiares, al ser casi inhabitables sus viviendas habida cuenta de los olores fétidos que rebosan de la alcantarilla.

Credito
EL NUEVO DÍA

Comentarios