Fui asaltado en mi buena fe, reconoció el Gerente de Acuaboquerón sobre El Tejar

ARCHIVO - EL NUEVO DÍA
Juan Baustista advierte que el Municipio quiere hacerle ver como el culpable cuando el compromiso fue prestar el servicio una vez se ejecutara las obras de conducción desde Peñaranda.

Tras un prolongado silencio, el gerente de Acuaboquerón, Juan Bautista, reconoció que fue asaltado en su buena fe por el Ibal y la Administración local, pues el compromiso que asumió él, como representante legal de la empresa, fue proporcionar agua a las mil 100 viviendas, una vez estuvieran listas las obras para recepcionar el líquido desde Peñaranda.

“Se aprovecharon de mi buena fe; soy una persona responsable, me engañaron y ahora quieren que yo les dé agua y sin traérmela y ellos dicen que están trabajando pero no la han traído”.

Bautista insiste en que antes de suscribir el acta de compromiso en agosto de 2013, en la que Acuaboquerón asumió la responsabilidad de prestar el servicio a los multifamiliares de El Tejar, la Alcaldía de Ibagué y él establecieron que una vez terminadas las obras de la línea de conducción de los 22 kilómetros hasta la planta de tratamiento número dos, se prestaría el servicio.

“Quieren culparme a mí y también al acueducto que porque no tienen agua y, culpa de quién, si no me han entregado ninguna obra”, aseveró el vocero.

Y señaló que la planta número uno está en operación pero no ha sido recibida, pues hay fallas en las compuertas que la anterior administración reconoció y sobre la que existe acción popular.

“No tengo por qué recibir una obra mal hecha”, agregó.

Por otro lado, reconoció que no puede obrar contrario a lo que los habitantes de las comunas 12 y 13 quieren, pues se oponen a la instalación de los micromedidores hasta tanto el agua sea conducida desde Peñaranda hacia la planta de tratamiento.

“Yo sé que las entidades oficiales son difíciles de que cumplan. Cuánto lleva el acueducto alterno y adónde lo han traído, pero el compromiso no es solo mío: también es de ellos”, concluyó.

Habitantes irán a tutela

Ante los estrados judiciales llegarán los pobladores de las veredas Cataimita, El Ingenio y Peñaranda para evitar que el Municipio capte agua de las quebradas La Cristalina, Pontezuela y El Rincón.

A esta conclusión llegó el Comité Prodefensa por el Agua, después de las reuniones que se han sostenido con la Secretaría de Desarrollo Rural y personal del Ibal, pues se oponen a que la línea de conducción de seis pulgadas atraviese la carretera y la falla geológica de El Salón; cárcava que, según los habitantes, ha permitido el hundimiento de la banca y de algunas viviendas que se ubican en laderas del cañón.

Walter Martínez, presidente del acueducto de la vereda Cataimita, señaló que recurrirán a la tutela con asesoría y el acompañamiento de la Personería para evitar que se extraiga el vital líquido directamente de las tres afluentes, lo que afectaría a las familias que se surten de las quebradas para el riego de sus cultivos y el consumo diario.

Según Martínez, en la reunión sostenida con la Secretaría de Desarrollo Rural, el pasado viernes, se les indicó por parte del personal de la Administración que ya firmado el contrato con la constructora Constrico no se puede reversar el proceso, por el cual la única alternativa es continuar con los trabajos.

El líder comunal indicó que la alternativa es militarizar la zona para cuidar que los trabajos se efectúen en el plazo acordado por Cortolima.

Visita de órganos de control y ministerio de Vivienda en Ibagué

 Voceros de la Superintendencia de Servicios Públicos, Procuraduría General y Ministerio de Vivienda arribarán a Ibagué el próximo 21 de agosto para conocer de primera mano por qué no ha sido posible que el Municipio garantice el suministro de agua a las mil 100 viviendas del proyecto Multifamiliares El Tejar.

La decisión se tomó ayer, durante la audiencia de control efectuada por segunda vez al alcalde de Ibagué, Luis H. Rodríguez, por parte de la Procuraduría General y el Ministerio de Vivienda.

El Mandatario insistió que es solo responsabilidad de Acuaboquerón la no prestación del servicio, puesto que el Municipio ha cumplido con las obras como la compra de micromedidores y la adecuación de la planta número uno de tratamiento.

“Hoy no hay agua por culpa y responsabilidad de Acuaboquerón”, aseveró.

El Mandatario refirió que la posición de la Constructora Colpatria es de preocupación, pues la comunidad se opone al proyecto y descartó, por el momento, que la empresa emprenda acciones legales contra el Municipio, ya que ha visto el interés de la Administración municipal para la instalación de la línea de conducción en Peñaranda.

“Este es un proyecto que tiene diseño y la garantía de que la obra se va hacer en perfectas condiciones y que no va a afectar a la comunidad”, explicó Rodríguez, quien advirtió que estas comunidades tendrán como contraprestación obras de beneficio para sus acueductos. 

Credito
EL NUEVO DÍA

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