Según la resolución, el mal manejo de la pollinaza genera olores ofensivos, afectando no solo el medio ambiente, sino a los residentes circundantes al sector.
“Durante la visita se evidenció un inadecuado manejo de pollinaza generada, en lo pertinente a sanitización con altos contenido de humedad, evidencia de generación de olores ofensivos, además ‘el usuario no dispone de un área que permita el adecuado manejo, almacenamiento’ y tratamiento de la gallinaza dentro del mismo predio”.
La autoridad advierte que para la fecha de la inspección técnica, en junio de 2012, la empresa no disponía de una planta de tratamiento de abono orgánico para que la pollinaza fuera tratada o transformada por terceros
“Es claro que inobservó la normatividad ambiental al no disponer de forma adecuada los residuos sólidos (pollinaza) derivada de la actividad avícola de la granja Ambalá, causando afectaciones al suelo y al aire con la generación de olores ofensivos, debido al mal manejo que se ha dado a estos desechos, siendo esta conducta contraria a las disposiciones constitucionales”.
Según la autoridad ambiental, la conducta incurrida por parte de la empresa, deteriora los suelos y causan daño o molestia al individuo.
Comentarios