El debate de control político llevado a cabo ayer por el concejal Pedro Antonio Mora a la Secretaría de Salud municipal reveló que el número de potenciales suicidas durante este cuatrienio ascendió a 824 y 124 han optado por quitarse la vida. La cartera de salud municipal reportó que para el presente año se han registrado 23 casos de suicidio.

El cabildante Pedro Mora sostuvo que la cifra de potenciales suicidas es alarmante, al igual el hecho de que solo 26 personas hayan hecho uso de la Línea Amiga, máxime cuando los recursos invertidos en este programa y que hacen parte de la política pública de salud mental, asciende a los 186 millones de pesos.

Para Mora la estrategia no ha funcionado, los recursos son más que suficientes, pero no ha tenido un impacto e Ibagué continúa elevando el número de personas que acaban con su vida y encabezando los primeros lugares a nivel nacional por este flagelo.

“Línea Amiga fue una estrategia que no sirvió para nada. 26 llamadas es una vergüenza, se está perdiendo la plata. Atiendo más pacientes yo en salud mental que lo que hacen seis personas en Línea Amiga. Esto quiere decir definitivamente que esto no sirvió y no está generando ningún impacto”, explicó Mora.

La secretaria de Salud, Gilma Lucía Peña, reconoció el fracaso que representa el bajo número de personas atendidas a través de este programa en relación con el año anterior. Sin embargo, considera que la estrategia no es acabar con el programa, sino revaluar las estrategias de difusión y hacerla más asequible a través de la línea 123 de la Policía nacional que ha recibido mayor aceptación.

“Si comparamos el año pasado frente a este, sí, no es lo esperado. Aumentamos el personal porque vimos los resultados del año pasado. Estamos las 24 horas con cuatro líneas, estamos con el mismo objetivo general de la línea amiga, pero en la evaluación de resultados es claro que debemos revaluar el proyecto. ¿Qué nos está sucediendo, porqué no nos está dando resultados, nos ha faltado difusión de la línea amiga?, y lógicamente poner una persona en la línea 123”, refirió la Secretaria de Salud.

Peña recordó que los recursos girados por el Municipio para el proyecto son propios y él mismo fue incluido dentro del presupuesto para 2016.

La solución de la funcionaria está en promocionar aún más la línea, ya que es un servicio gratuito disponible para tratar este tipo de comportamientos y los relacionados con el maltrato físico, depresión, trastorno bipolar y enfermedades de salud mental tanto en adultos como en menores de edad.

“La línea amiga es buena, es un medio bueno. La línea amiga no es para quitarla, porque da buenos resultados”, concluyó la funcionaria.