El gerente del Ibal, José Alberto Girón, indicó que con los recursos se garantiza no solo la compra de elementos que no fueron incluidos en el contrato, sino la culminación de la línea de conducción que irá desde el distrito hidráulico 11 o tanque de Mirolindo con el de Picaleña, y que se dejaría pendiente para ajustar el valor del mismo a las necesidades expuestas.

“Ya sabemos que la obra va a costar mil 900 millones de pesos más, porque hicieron faltan 500 metros de tubería, las válvulas reguladoras entre el tanque de la zona industrial y el tanque de Mirolindo, faltaron todos los aislamientos de energía del tanque porque es metálico y por encima pasa una red eléctrica”, indicó el directivo.

El valor del contrato estaría por el orden de los 12 mil millones de pesos y se espera que reinicie en los primeros días de noviembre.

“Ya hicimos todo el balance, está en manos del supervisor del contrato y se tiene todo listo para la firma del acta de reinicio. Solo se está a la espera un concepto de la oficina jurídica para que dé un concepto y se le pueda pagar la primera acta de obra al contratista”, precisó Girón.

El valor está alrededor de los mil 300 millones de pesos descontando la amortización del anticipo que se pactó del 30 por ciento sobre el valor del contrato.