Al periodista Jorge Eliécer Barahona, quien ha denunciado irregularidades en la ejecución del proyecto de vivienda para periodistas Portal de San Gabriel, le fue archivada una denuncia penal por el delito de calumnia a raíz de la mención que hizo del abogado Rubiel Orlando Espinosa como representante de la constructora Ávila, ejecutora del proyecto.

La Fiscal 41 Delegada de la Seccional Tolima determinó que “las manifestaciones realizadas por Jorge Eliécer Barahona no se enmarcan en ningún delito, ya que los hechos no estructuran un hecho punible (…), y dicha manifestación por sí sola no estructura un hecho punible”.

EL NUEVO DÍA habló con Barahona, quien se ratificó en el hecho de que el abogado Espinosa de “una u otra manera” ha estado inmerso y ha tenido injerencia en el manejo de este proyecto.

EL NUEVO DÍA: Usted tenía una demanda por injuria y calumnia. ¿Qué la motivó?

Jorge Eliécer Barahona: Todo nació cuando empezamos a denunciar lo que ocurría con el proyecto de vivienda Portal de San Gabriel, y nos dimos cuenta de que desde que se firmó el contrato con Ávila Ltda., el señor Orlando Espinosa y su hijo Iván Espinosa aparecían en todos los documentos, es decir, jamás la constructora hizo alguna gestión que tuviera que ver con el proyecto, se firmó el contrato, y de ahí en adelante los señores Espinosa se encargaron del desarrollo de todo el proyecto, empezamos a buscar las pruebas, y cuando este servidor las tenía, hicimos algunos comentarios, no solamente por las redes sociales, sino también por radio.

Entonces a Rubiel Orlando Espinosa no le gustó y salió a rechazar los comentarios, a decir públicamente, que me daba 72 horas para que le aportara las pruebas en su oficina, donde le demostrara que él aparecía como abogado de la empresa, o en algún documento vinculado con Ávila. Esperé a que pasaran las 72 horas y le manifesté que como se habían cumplido, me dijera en qué Fiscalía había instaurado la denuncia para entregar las pruebas. El señor no quiso responder más. Después fue que me di cuenta de que la había instaurado en la Fiscalía 41 de Ibagué, me llamaron a una audiencia de conciliación, yo asistí y el señor Espinosa no.

E.N.D.: ¿Pero ya se tiene una decisión de la Fiscalía?

J.E.B.: Sí. La señora fiscal revisó el proceso y analizó que no tenía mérito para empezar una investigación, entonces decidió archivarlo, obvio con los documentos que estoy aportando, que son pruebas contundentes con que se demuestra que el señor sí estaba vinculado de una u otra manera con el proyecto de vivienda; es más, él en medio de todos sus alegatos y discusiones envió una carta al señor Gilberto Martínez Prado, en que dice que él no es abogado ni está vinculado en la constructora Ávila Ltda., sino que es abogado de la asociación de periodistas Anpress.

En esta carta, prácticamente el señor se contradice en todo lo que dice, y finalmente lo que se logró demostrar ante la Fiscalía es que yo tenía la razón, y que la denuncia que me hacía por injuria y calumnia no tenía ningún asidero.

E.N.D.: ¿En qué documentos usted demostró esos vínculos?

J.E.B.: Nosotros tenemos pruebas en que la curaduría informa que a solicitud del señor Rubiel Orlando Espinosa entregan un documento, hay documentos de Ávila Ltda. en que también manifiestan que le hace autorizaciones para que los representen en reuniones, es decir, que sí tenía vínculos con la empresa. Por ejemplo, hay unas actas en que se reunía también con la Gestora Urbana para decidir sobre el proyecto, en fin, completa injerencia y participación del señor Rubiel Orlando Espinosa, quien ha tenido vinculación con el proyecto de vivienda Portal de San Gabriel, lo más extraño es que niega esa participación.

E.N.D.: ¿Por qué el interés de Rubiel Orlando Espinosa de no ser relacionado con Ávila?

J.E.B.: No entiendo el miedo o temor, cuando hice pública la pregunta de qué hacía Rubiel Orlando Espinosa vinculado al proyecto de vivienda, si sabíamos que el constructor era Ávila Ltda., y el contrato se firmó entre la Gestora Urbana y dicha constructora; eso fue el escándalo inmenso, la preocupación, seguramente era que tenía miedo de lo que iba a pasar, ustedes saben que se han descubierto muchas cosas.

En medio de nuestra investigación, nos dimos cuenta de que estos señores participaron y después de que hicimos el debate del Concejo, Iván Espinosa, quien figuraba como gerente constructor del proyecto renunció, y de ahí para acá se ha venido desmoronando todo lo que querían demostrar.

E.N.D: ¿Cree que la intención era que el proyecto solo fuera manejado por unos pocos?

J.E.B.: Lamentablemente hay mucha gente involucrada por debajo de la mesa en este proyecto, como es el señor Gilberto Martínez Prado, a pesar de que él era el inicialmente representante del proyecto y a él le autorizamos para que actuara en favor de nosotros, él finalmente lo abandonó, pero entre comillas, porque por debajo de la mesa el señor Gilberto Martínez Prado seguía manejando los hilos y todo eso nos da a entender que hubo un contubernio, una asociación para delinquir, conformada entre el señor Gilberto Martínez Prado, Rubiel Orlando Espinosa y otros, para prácticamente quedarse con el proyecto de vivienda de los periodistas.

Pero como vemos, ya todo se les ha desbaratado, y logramos descubrir que los recursos que había donado o asignado la Gobernación para subsidios, los cambiaron de destinación y según dicen ellos, porque no han logrado comprobar, no hay documentos, comprobantes de pago, de gastos, de avances de las obras en que se diga que la plata fue bien invertida, no han podido demostrarlo, ni la Gestora Urbana, ni la Constructora y nadie.

E.N.D: La Alcaldía descartó contratar a la SCI para efectuar el peritazgo a las obras a medio hacer...

J.E.B.: Justamente estamos pidiendo al Alcalde de Ibagué y al Secretario de Infraestructura de la Gobernación que se solicite y haga un peritazgo, porque no podemos seguir con el cuento de que el peritazgo vale 300 o 450 millones de pesos, y que no hay plata.

Según lo dice la Gestora Urbana, fueron girados más de mil 500 millones de pesos, y en un solo desembolso que es curioso cuando una obra se hace por avances, pero se los habrían desembolsado de una sola para entregarlo al constructor, por eso debe esto demostrarse con el peritazgo de resto, no aceptamos nada.

E.N.D.: La Gestora Urbana ha dicho que la plata de los subsidios está en la fiducia...

J.E.B.: Yo hice un comentario en Facebook referente al artículo que ustedes publicaron, en el que dirijo una cantidad de aclaraciones a la Gerente de la Gestora Urbana, porque por un lado, nos certifica en un documento que se desembolsaron mil 152 millones de pesos para obras de urbanismo y que la plata se le entregaron al constructor, pero la gerente de la Gestora Urbana de la anterior Administración expidió unas resoluciones en las que asignaba subsidios a la gente por cerca de ocho millones de pesos.

La pregunta es que si la plata que estaba destinada para unos subsidios le cambiaron la destinación y la invirtieron en unas obras de urbanismo, entonces por qué van a expedir unas resoluciones en las que entregan unos subsidios, cuando la plata ya se la gastaron, aunque la Gerente de la Gestora dice que no, pero a nosotros en un documento nos certificó que sí desembolsaron mil 152 millones de pesos.

E.N.D.: Es decir, ni la Alcaldía se pone de acuerdo para dar una versión clara del destino de los recursos...

J.E.B.: La gerente anterior, María del Pilar Hurtado, dijo que habían invertido en obras de urbanismo. Rubiel Orlando Espinosa, en una publicación de ustedes, dijo que esa plata no era de la que asignó la Gobernación, sino de particulares. Entonces, ¿a quién creemos?, y en el último informe que publicaron ustedes les dijo que mil 300 millones habían sido desembolsados, es decir, que la plata la siguieron gastando y el proyecto parado, un poco de contradicciones de la gerencia de la Gestora que no entendemos.

E.N.D.: ¿Ve viable la posibilidad de que se liquide el convenio con Ávila?

J.E.B.: La verdad es que eso está muy enredado, lo mejor para todos sería que liquidaran el proyecto, la verdad es que quieren arreglar las cosas y yo no le veo ninguna solución. El lote, aunque dicen que está a nombre de la Gestora Urbana, tenemos una escritura donde la Gestora Urbana se la hizo a Ávila Ltda., al señor Antonio Ramón Ávila, que es el constructor. La verdad es que no encontramos otra salida.

E.N.D.: ¿Pero acaso el inmueble no está dentro de la fiducia?

J.E:B.: Nosotros nos basamos en un poder especial en que se dice que se autoriza a la Gestora Urbana para hacer entrega de manera irrevocable al constructor del inmueble, qué quiere decir, que el señor no puede devolver el lote. Lo que dice ahí es grave y eso es una prueba fehaciente de lo que lo que estamos diciendo.

E.N.D.: ¿Quiénes aparecen en ese poder? 

J.E:B.: Aparece Luis Fernando Fandiño, en calidad de suplente del Presidente de la Alianza Fiduciaria, quien otorga poder especial amplio y suficiente a Antonio Ávila Chassaigne como representante a Ávila Ltda., para que en nombre de Alianza Fiduciaria suscriba la escritura pública mediante la cual la Gestora Urbana transferiría a título irrevocable el pleno derecho de dominio y la posesión del inmueble denominado Aparco.

E.N.D.: Entonces, el predio quedó en manos de Ávila...

J.E.B.: Ese es el poder especial que le da la fiducia a la Gestora Urbana para que le haga la escritura al constructor, eso es lo que dice el documento. Y lo que pasó es que la Gestora Urbana le da el lote al señor constructor. En el documento aparece que es un Fideicomiso Portal de San Gabriel, pero el lote a través de ese fideicomiso está a nombre del señor constructor, imagino que es él quien aparece en el fideicomiso. Yo le hice un derecho de petición a la Gerente de la Gestora Urbana, hace más de un mes, en el que pedí que por favor me diera los nombres de quiénes integran ese fideicomiso y esta es la hora que no me ha respondido.

E.N.D: ¿Qué responsabilidad le atañe a esta administración?

J.E.B.: El único pecado que tuvo la Alcaldía actual es que asumieron el proyecto, y debieron haberlo rechazado, haber dicho ‘no lo recibimos’ y que se fuera a investigación. Recibieron el proyecto y se echaron los problemas encima, entonces ahora no hallan cómo quitarse todo este lío de encima, ahí dijo el Alcalde que liquidaría el contrato con Ávila Ltda., que porque era una persona que estaba seriamente cuestionada en La Guajira, que tenía procesos penales por malos manejos de obras, que por eso terminaba el contrato, pero según las palabras de la señora Gerente, quieren continuar con el proyecto, entonces es una situación bastante enredada.

E.N.D.: ¿Usted tiene alguna petición para las autoridades municipal y departamental?

J.E.B.: Lo que pedimos es que nos respeten lo que aportamos para el proyecto de los periodistas, y no para los periodistas con dos o tres apartamentos, como aparecen en el listado que tenemos, que nos hace preguntar si era un negocio o una solución para los periodistas.

Cómo es posible que un lote que actualmente vale más de $20 mil millones, más cerca de $3 mil millones aportados entre la Gobernación y la Alcaldía, con toda esa plata sigamos esperando el milagro del Portal de San Gabriel para tener una vivienda.

Hay empresarios que nos han dicho que pueden aportar, pero como la avaricia de personas, hasta de un colega que me da pena decir que es colega, de pensar que con eso se iban a llenar de plata y se olvidaron de la necesidad de los periodistas de escasos recursos económicos y llevaron el proyecto a una bancarrota.

La transacción de los dineros

En documento del 21 de enero de este año, la hoy exgerente del banco de tierras, María del Pilar Hurtado, certificó que en 2015 fueron girados a la Constructora Ávila mil 152 millones 675 mil pesos, con base en un otrosí modificatorio al contrato de fiducia para obras de urbanismo.

Se señala que la fiducia, Alianza Fiduciaria S.A., no “verificaría la destinación de los recursos, únicamente se encargaría de efectuar el giro”.El secretario de Infraestructura del Tolima, Andrés Fabián Hurtado, anunció en agosto la liquidación del convenio suscrito con la Gestora Urbana por incumplimiento en la consecución del proyecto, lo que conllevaría al reintegro de los mil 830 millones aportados a los 300 beneficiarios del proyecto como subsidio.  

La actual gerente de la Gestora Urbana, Sandra Meneses, indicó que los recursos entregados por la Gobernación estaban en la fiducia y que de liquidarse el convenio no se podría dar continuidad al desarrollo del proyecto.

Opine

Andrés Forero (Comunicador social - periodista)

Pagó la totalidad de la cuota inicial del proyecto: 16 millones de pesos.

Según el profesional, al haberse condicionado el subsidio entregado por el Departamento al desarrollo de este único proyecto se “atenta contra el principio de la igualdad, al igual deberíamos poder ser vinculados a otros proyectos de la Gestora Urbana y estoy pensando en tutelar eso, porque somos víctimas de este proceso.

“Si la constructora incumplió, nosotros no tenemos por qué pagar los platos rotos. Pero además, no hay voluntad política. A este gobierno se le olvida que somos ciudadanos como cualquier otro y que tenemos derecho a acceder a vivienda propia”.

Jaime Torres (Comunicador social)

Aparece en el listado dado por la Gestora para la compra de tres apartamentos. Sin embargo, desmiente la situación y afirma que solo pagó la cuota inicial para uno. En su opinión, “independiente de la liquidación y los múltiples tropiezos por acciones legales interpuestas por terceros, quedo en medio de un grupo de trabajadores de los medios y funcionarios públicos que hoy se les esfumó el sueño de tener vivienda digna.

Es muy triste de un proyecto que nació de un grupo de periodistas que solo buscaba romper la historia de colegas que culminan su vida sin tener techo para ellos y su famila. Es infortunado no saber quién y por qué el proyecto no tuvo feliz término. La esperanza y la credibilidad están tan desaparecidas como el comienzo de las obras”.

Frase

 "Hace dos años elevamos esta queja a la Fiscalía y estamos preocupados porque no nos han manifestado nada, pensamos que ya es hora de que nos digan qué pasó con los recursos que giró la Gobernación del Tolima", Jorge Eliécer Barahona.