Findeter entregará mañana el informe del diagnóstico efectuado a la tubería de conducción que fue instalada por el consorcio Acualterno, firma que tuvo bajo su cargo la frustrada construcción de la fase Uno del acueducto complementario.

El gerente del Ibal, José Alberto Girón, aseguró que los resultados advierten posibles irregularidades en dichas obras, que luego serán denunciadas ante las entidades de control.

Entre otras cosas, el funcionario explicó que ya se detectaron fugas en la mayoría de los empalmes instalados a lo largo de los ocho tramos que se definieron, esto debido a la mala ejecución de las obras civiles.

“Ni un solo metro de tubería fue probada con agua, como lo exige el reglamento técnico de agua potable y sanemiento básico, que dice claramente que las tuberías de línea de conducción deben probarse cada 500 metros, eso es una norma legal y no se hizo”, acotó.

Así mismo, la línea de conducción no cuenta con un sistema de anclajes adecuado, es decir que la estructura que contrarresta los movimientos que puedan desacoplar la tubería, pese a las malas condiciones de instalación, permanece en buen estado pero sin ser funcional.

Se espera que la próxima semana la Subgerencia Técnica de Agua de Findeter divulgue a la opinión pública los detalles del diagnóstico contratado por dicha entidad. También se darán a conocer el valor de las futuras reparaciones.

“En este informe no hay ningún sesgo, allí se va a presentar en blanco y negro qué se encontró. La información que entregan los consultores es que la tubería no fue probada en debida forma, lo que produjo fallas que van a tener un costo para corregirlas”, indicó.

Recordemos que el contrato con Acualterno se liquidó en octubre de 2015 y las irregularidades en su desarrollo son objeto de investigación por la Fiscalía y la Procuraduría General.

Inicio de las obras

Las obras iniciarán entre la última semana de octubre y los primeros días de noviembre, con cuatro frentes de trabajo: la construcción de un túnel, los viaductos de empalme a desarenadores, la instalación de tuberías y la intervención de una falla geológica del río Cocora, que se está socavando parte del terreno.

La obra esta prevista para terminarse en marzo de 2018; sin embargo, debido a la complejidad y el estado del proyecto, se podrían prolongar hasta junio o julio de ese mismo año.

El Ibal confía en que el proyecto se pueda adelantar con los recursos que ya están asignados, no obstante podrían surgir eventualidades durante el avance de las obras, que implicarían alguna adición presupuestal.

Para mañana está previsto un recorrido, con el fin de socializar el actual estado de la tubería y presentar el cronograma de trabajo con los órganos que intervienen en el proyecto.

Dato

La Alcaldía y el Ibal adelantarán la ejecución de la fase Uno del acueducto complementario por 11 mil 900 millones de pesos.

Cifra

4.7 kilómetros de extensión tiene la fase Uno, desde la bocatoma Cocora hasta el río Coello.