La administración de Roncesvalles está reclamando a la Empresa de Energía del Pacífico, Epsa, el pago de 60 mil millones de pesos que corresponden al impuesto de Industria y Comercio (ICA) que adeuda desde que inició la operación en 2015.

Gustavo Adolfo Patarroyo Cubides, abogado del Municipio, aseguró que el año pasado la firma generó ingresos por 450 mil millones de pesos; sin embargo, solo ha hecho una contribución anual que ronda los 28 millones de pesos.

Según explicó Patarroyo, dentro de su gestión tributaria y con base en la ley 56 de 1981, que hace referencia al cálculo de la capacidad instalada, la Administración inició un proceso de recuperación de impuestos a las empresas que operan en la población.

Tras realizar el cobro, Epsa demandó al Municipio y consiguió que fuera suspendido el proceso de cobro coactivo, medida que posteriormente fue apelada por la Administración ante el Consejo de Estado.

“Estamos recaudando el material probatorio para poder demostrar ante el Tribunal Administrativo y el Consejo de Estado que ese dinero se le adeuda al Municipio (...), se han recibido presiones de Epsa con tutelas y otros recursos, pero estamos seguros de la reclamación”, aseguró Patarroyo.

En medio del litigio, la empresa ha presentado argumentos técnicos sobre la forma de calcular la capacidad instalada para negarse a realizar el pago. Por el contrario, la Administración sostiene que está actuando en el marco de Ley.

“Ellos han recaudado dinero gracias a la naturaleza y al agua de Roncesvalles, pero ellos solo han entregado un monto anual que no representa nada en comparación a lo que están sacando por la generación de energía”, concluyó.