El exconcejal de Ibagué y recién nombrado secretario de Gobierno municipal, José Alexis Mahecha Acosta, reconoció que continúa vinculado a la investigación por el sonado caso de las chuzadas ilegales del desaparecido Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) y que fueron puestas al descubierto en 2009.

Mahecha argumenta que lo anterior no le representa inhabilidad para ejercer cargos públicos y que las conductas endilgadas por la Fiscalía Delegada ante la Corte Suprema de Justicia (el 31 de agosto de 2016) se encuentran prescritas desde el pasado 31 de diciembre.

“La verdad nunca me decretaron medida de aseguramiento, pero sigo vinculado al proceso como cualquier otra investigación; lo cierto es que eso prescribió desde el 31 de diciembre”, precisó Mahecha en entrevista concedida a EL NUEVO DÍA.

El excabildante, quien se encuentra vinculado junto a otros 12 exfuncionarios del DAS, fue acusado de la presunta comisión de los delitos de concierto para delinquir en relación con violación ilícita de comunicaciones, utilización ilícita de equipos de transmisión y recepción y abuso de autoridad, entre otras conductas.

El caso de la acusación se remonta a cuando ejercía como Jefe Seccional del DAS en Santander.

“Todo el proceso se basa en lo que fue el famoso grupo G3, por eso nunca me dictaron medida de aseguramiento, lo que sí hicieron con otros que estaban vinculados en el grupo. En esa época yo estaba vinculado como Director del DAS en Santander y nunca se falló en contra mía, pero sigo vinculado a la investigación; aunque prescribieron seis conductas, quedada una pendiente y esa ya prescribió” (el 31 de diciembre de 2016), agregó.

De acuerdo con el excabildante, la razón se debe a que el 1 de enero de 2005 arrancó el nuevo sistema penal acusatorio (Ley 906) y el caso se trabajó por la Ley 600, antiguo código de Procedimiento Penal.

Según él, esto ocurrió con José Miguel Narváez, a quien el Tribunal Superior de Bogotá le prescribió el proceso, ya que las conductas investigadas se remontaban a hechos acontecidos entre 2003, 2004 y 2005.

De acuerdo con el exconcejal, Narváez no quedó en libertad el 15 de diciembre por tener pendientes otros expedientes como por ejemplo el del periodista Jaime Garzón y otros .

“No soy responsable de nada porque toda la vinculación mía fue por cubrir un evento que yo firmé como director seccional. El Ministerio Público siempre ha solicitado que se precluya la investigación a mi favor, pero la Fiscalía la ha mantenido ahí abierta”, agregó el excapitán.

Según recuerda, por el denominado grupo G3 fueron vinculadas 35 personas y de esas al menos 17 resultaron condenadas, a otras se les dictó medida de aseguramiento y algunas quedaron en libertad.

“Todo lo que hice fue cubrir un evento de una persona que hablaba mal del gobierno y dos personas que hablaban bien del gobierno y se mandó el informe de los tres, y por ese informe que apareció en una AZ es que dicen y me vinculan a mí y a mi coordinador. A mi coordinador ya le precluyeron atendiendo el concepto del Ministerio público, pero a mí no por ser directivo, porque los hechos única y exclusivamente se debieron a la contestación de un requerimiento del nivel central de cubrir un foro abierto en el año 2004”, narró Mahecha.

El exconcejal también fue investigado por presuntas chuzadas a la casa editorial Vanguardia Liberal, tema que según él, es totalmente aparte de las investigaciones del G3, pero que fue incluido en el mismo paquete. Además, de que dicho proceso fue archivado.

“Lo de Vanguardia Liberal definitivamente lo archivaron porque el Señor Alejandro Galvis fue el que habló a mi favor. Primero, nunca hubo una investigación sobre ese tema porque nunca hubo el hecho, el mismo señor Alejandro Galvis habló con Andrés Peñate en ese momento y por eso lo único que hicieron fue trasladarme de seccional de Santander a Quindío, y después de un tiempo Andrés Peñate me pidió disculpas por ese caso y no pasó nada”, puntualizó.