Estrategias de adaptación al cambio climático en sistemas agrícolas

Jorge Cuéllar - el nuevo día
La Universidad del Tolima, a través del grupo de investigación Producción Ecoamigable de Cultivos Tropicales (Proecut), publicó el libro ‘Estrategias de adaptación al cambio climático en sistemas de producción agrícola y forestal en el departamento del Tolima’, manual práctico a través del cual se orientan acciones sustentables para mitigar y prevenir los efectos del calentamiento global.

Este trabajo, realizado con la participación de un importante grupo interdisciplinario, describe de manera sencilla una serie de elementos mediante los cuales el sector agropecuario y forestal del Tolima, puede prevenir y mitigar los efectos del cambio climático.

Cambio climático

En el primer capítulo de esta publicación, se hace una introducción hacia las diferentes generalidades del cambio climático, sus causas, consecuencias, y como inciden estás en la producción agrícola y forestal del Departamento.

El cambio climático, según explicó el profesor Hernán Andrade, miembro de este grupo de investigación, es consecuencia del fortalecimiento del efecto invernadero, originado por la emisión de gases como el Co2.

“Todas las actividades que tienen que ver con deforestación, quemas, cambios del uso del suelo hasta sistemas destructivos, el uso de combustibles fósil, la producción de cemento, el uso de fertilizantes nitrogenados y cal agrícola son agentes que emiten Co2, que fortalece el cambio climático”, indicó.

De acuerdo con la obra, uno de los posibles impactos en la agricultura como resultado de la alteración del clima, tiene que ver con daños en los cultivos, erosión del suelo e inhabilidad para cultivar tierras debido a la extracción de agua de los suelos, así como menores rendimientos, daños y pérdida de cultivos, incremento en la muerte del ganado y aumento del riesgo de incendios silvestres.

También se explican las razones por las que el calentamiento global afectaría la producción agrícola en el Tolima, pues según explicó el profesor Andrade, algunas zonas van a presentar mayor precipitación que en el pasado, y también van a presentar temperaturas mayores a las que presentan habitualmente, lo cual hace que los sistemas de producción cambien.

“Las plantas y la fauna se van a comportar de diferente forma, haciendo que estos sistemas sean mucho más vulnerables a cambios a los cuales no están adaptados”, explicó.

Prácticas para la adaptación al cambio climático

Una de las estrategias para adaptarse a las variaciones del clima, es mediante el uso de material genético adaptado a las condiciones cambiantes. Esto básicamente tiene que ver con el mejoramiento genético de cultivos, o el trabajar con especies adaptadas a esas condiciones.

Con relación a este tema la Universidad del Tolima, está trabajando con unas líneas de fríjol tolerantes al calor, las cuales podrían ser recomendadas para aquellas zonas donde la temperatura se está incrementando, convirtiéndose en estrategia clave para adaptarse al cambio climático.

Otra de las estrategias presentadas en este libro, está relacionada con el manejo del suelo, pues según revela el profesor Andrade, tradicionalmente la agricultura prepara el suelo hasta dejarlo completamente “polvo”; por el contrario, actualmente se busca preparar el suelo lo menos posible, de modo que le brinde unas condiciones adecuadas a los cultivos, a la vez que se reduzca la emisión de gases de efecto invernadero.

La labranza y el manejo del agua en el suelo

La labranza consiste en remover la capa vegetal del suelo y prepararlo para eliminar arvenses y adecuar una cama al cultivo. A través de esta, se busca alterar lo menos posible la composición, estructura y biodiversidad del suelo, a fin de evitar su erosión y degradación.

Una de las estrategias y prácticas que permite reducir la preparación de los suelos, es la labranza de conservación, pues está permite eliminar el movimiento del suelo y residuos de cosechas anteriores, con lo cual se reduce la erosión y se permite manejar la humedad e incorporar nutrientes.

Estrategias de adaptación en cultivos perennes

Los sistemas de producción con cultivos perennes, tales como café, cacao y frutales, son los menos afectados por el cambio climático. Las estrategias de adaptación para estos cultivos incluyen el manejo sostenible de recursos, uso de riego, variedades resistentes a la sequía y a temperaturas altas. Adicionalmente hay otras estrategias, más exclusivas de los sistemas con cultivos perennes como el manejo de doseles de sombra.

Manejo del agua

El manejo del agua, según advierte el Proecut, es otra de las estrategias abordadas para enfrentar el cambio climático. Una de estas es la cosecha y manejo de aguas lluvia para utilizarla en los cultivos y el lote de producción.

“Es necesario identificar la fuente de agua (ríos, embalses, reservorios) y el sistema de distribución. Asimismo, el agua debe cumplir los requisitos químicos y bacteriológicos, según la norma de calidad para el uso en agricultura. Por ejemplo, no es recomendable utilizar aguas residuales para riego, por lo que dentro de esta cartilla se recomiendan prácticas que contribuyan al buen manejo del recurso hídrico en los sistemas productivos”, explican.

El ‘Caballoneo’, es una de esas prácticas. Consiste en un levantamiento topográfico para el diseño de riego y drenaje de acuerdo con la condición de cada lote. Con esta técnica se puede minimizar la pérdida de agua y mejorar la distribución y retención de humedad del suelo.

Otra de las estrategias que sugiere el grupo de investigación, es sembrar en las épocas adecuadas, de acuerdo con los cambios en los patrones de lluvia, para así mismo cambiar las épocas de siembra.

Ordenamiento territorial

Este es otro de los temas incluidos dentro de esta publicación, en la que se sugiere que cada municipio tenga un mapa de ordenamiento territorial, para establecer cuáles son las zonas aptas para cada tipo de sistema de producción.

La importancia de este aspecto radica en que la reubicación de actividades de producción de cultivos perennes se debe realizar de acuerdo con los nuevos planes de Ordenamiento Territorial, pues según explican los miembros de este grupo de investigación, esto permite delimitar la frontera agrícola en cuanto a la protección de ríos, quebradas y Páramos, entre otras consideraciones.

De igual manera, muchos otros importantes temas asociados a esta problemática ambiental, están disponibles en esta publicación, razón por la que la invitación del grupo de investigación, Proecut de la Universidad del Tolima, es a conocer y hacerle un seguimiento minucioso a este manual, toda vez que está orientado a promover la sostenibilidad ambiental y a ofrecer herramientas prácticas a los productores del Departamento para contrarrestar los efectos del cambio Climático.

Sistemas agroforestales

Los sistemas agroforestales son la combinación deliberada de árboles con cultivos, como método de manejo de suelos y repoblación forestal. Estos sistemas de producción hacen un aporte importante ya que contribuyen al mejoramiento de los suelos degradados, la formación de los bosques y la utilización de diversidad de cultivos.

Son de especial importancia en el aumento de las resistencias a los fenómenos climáticos extremos, mediante la mejorada retención de agua y la fertilidad enriquecida del suelo, así como la diversificación de fuentes y un ‘colchón’ de ingresos cuando se pierden las cosechas.

El refuerzo a la productividad, la reducción de ataques de plagas y enfermedades y el mejoramiento de suelos, son otros de los beneficios de este sistema, que ha sido utilizado en cultivos de café y cacao, obteniéndose buenos resultados, pues entre otras cosas, permite la fijación de carbono para mitigar el cambio climático, permitiendo que la gente pueda producir café como tradicionalmente lo viene haciendo.

“Los sistemas agroforestales son necesarios para proteger los cultivos de factores como las lluvias fuertes, de la radiación y altas temperaturas, es una especie de amortiguador de estas condiciones”, concluyó Andrade.

Credito
EL NUEVO DÍA

Comentarios