Los lusitanos, con un ineficaz Cristiano Ronaldo, se pusieron por delante gracias a un gol de Nani en el minuto 5. Pero en la segunda parte, los norteamericanos dieron la vuelta al marcador con tantos de Jermaine Jones (63) y Clint Dempsey (81). En el tiempo de descuento (90+5) Silvestre Varela hizo el 2-2 definitivo cuando el equipo ‘gringo’ ya casi celebraba el pase a octavos.

Sin apenas tiempo para saborear los himnos, una necesitada Portugal aprovechó un error calamitoso del norteamericano Geoff Cameron para ponerse por delante en el marcador a los cinco minutos por medio de Nani.

Tras el descanso, Ronaldo falló un mano a mano contra Howard (61) y Jermaine Jones selló el empate con una magnífica acción individual: controló el balón en la frontal del área, se perfiló y disparó con violencia a las mallas portuguesas, cuya victoria hasta entonces, por juego, parecía exagerada.

El cansancio empezó a causar estragos en ambas escuadras y Estados Unidos, perfecto física y tácticamente durante los 90 minutos, se benefició de ello. Kyle Beckerman centró y Dempsey empujó el esférico con el pecho para poner el 2-1.

Portugal, que estaba eliminada, se encomendó al milagro en los compases finales... y éste llegó: Cristiano Ronaldo asistió magistralmente desde la derecha y Varela, empujado por toda su nación, se lanzó a rematar de cabeza y selló el 2-2.