Anuncios desde el planeta Marte

Los aportes que nos envía el planeta Marte parecen premonitorios para entender el destino de nuestro planeta. No existe ninguna duda sobre la degradación biológica de Gaia, de la humanidad; y, todo por culpa de un desarrollo económico acelerado sin compasión.

Estamos apostando un precio muy alto a cartas que como el agua, el petróleo, el CO2, la extinción, el capitalismo, son una clara confirmación de lo dicho por los profetas del Apocalipsis…. Este camino nos va a conducir a resultados similares a los exhibidos por el Planeta Marte.

Los cambios climáticos globales nos amenazan, nos azotan y nos meten miedo. También se reflejan en enredos internacionales, rebeldías ciudadanas, despelotes económicos, incertidumbres religiosas, en una tectónica incierta, en sorpresas genéticas, todo ello traza estelas desconocidas por nosotros…  destinos más allá en nuestra limitada condición humana.

Si repasamos nuestras ignorancias tenemos que aceptar que no hemos podido comunicarnos con los extraterrestres, no entendemos las enseñanzas de Enoc, nuestro descreste con las pirámides, no queremos aceptar que hace tiempo nos visitaron los Anonaquis, seguimos adorando los portentos de San Agustín, respetamos la religión de los Arhuacos,.... pero lo más grave es que todavía no entendemos las interacciones con los otros planetas, galaxias y los otros universos… con respecto a la evolución del clima en cada planeta, en cada sistema, en cada galaxia…


Nuestro vecino, el planeta Marte, nos va a sorprender con sus registros sobre su nacimiento, evolución y muerte… pensados años luz… más allá del “día y la noche”, de nuestro calendario, de las 24 horas, de nuestra religión tan tacaña… y nos obligará a aceptar las posibilidades de vida en otros universos.


Y, podemos aprovechar esta gran oferta de conocimiento cósmico, para dimensionar nuestra concepción mental….


Podemos meterle cambios a todas las circunstancias… desde la Universidad misma, diseñar una nueva solidaridad humana que nos obligue a reconvertir las enseñanzas de Marte en nuevas posibilidades de vida….


Aprendiendo y aplicando las enseñanzas registradas en las páginas milenarias de otros planetas.


El cambio climático en las universidades
Es muy probable que las universidades puedan ofrecer alternativas docentes para enfrentar con éxito el colapso de esta civilización.  

Cada facultad deberá elaborar sus aportes. Nosotros en el afán de mostrarles a los estudiantes de biología de la  Tolima, la dimensión del Cambio Climático Global y explorar soluciones auténticas, las causas y consecuencias venimos desarrollando semestralmente un recorrido por tierra Pijao, allá en donde el clima es inclemente, para compartir la ruta de desertificación que están sufriendo los suelos tolimenses en el Valle del Magdalena, hemos escogido como centro la comunidad de las Lomas de Hilarco, donde ellos comparten una experiencia de tres días, con indígenas de la región, y registran las experiencia en un libro que  será  entregado  a quienes los acogieron en sus fincas.


Mi comunidad: Lomas de Hilarco
Por  parejas, los 23 estudiantes de biología, relatan sus vivencias ambientales y las registran en libros muy bien presentados, con fotos y textos… las experiencias.  

Sergio Pérez y Fabián Santos escogieron el nombre de su redacción “Solastalgia”, (*) Allí registran que en las Lomas de Hilarco, las tierras bajas del río Saldaña, donde se encuentran grupos que presentan condiciones agroecológicas críticas: fuerte inclinación a la erosión, terrenos con afloramientos rocoso, salinos y ácidos; periodos climáticos con tendencia árida donde en las épocas de lluvia los intensos aguaceros barren y arrastran las capas de suelo.


(*Ser testigo directo de la propia destrucción de su hogar).


En los terrenos ocupados por la comunidad indígena Lomas de Hilarco, no existe un río caudaloso, pero la comunidad goza de una buena hidrografía, como son ríos, quebradas y vertientes.


Los ríos más importantes son el Guaguarco e Hilarco y las quebradas Cuello, Hilarquito, Matachiva, La Babillera, Maetuno, La Chonta, Liliarco y Peñosa; las cuales desaparecen sus caudales una vez cesan las lluvias, dejando solo charcos en su cauce, comentan  en su texto Daniel Molina y Alejandra Vargas.


Y el desierto avanza

Además de estos fenómenos, también encontramos otros con gran relevancia en nuestro país como lo es la desertificación, que es un proceso de deterioro ambiental, donde el suelo se vuelve menos productivo, la estructura física y composición bioquímica del suelo empeora, y la vegetación no nace, teniendo como un ejemplo claro de este proceso al Desierto de la Tatacoa, del cual afirman que en donde hoy aflora el terciario, antes de los españoles, era un jardín con miles de flores y árboles que poco a poco se fue secando hasta convertirse en una zona desertificada.

La tala indiscriminada, la introducción de ganado y la destrucción de hábitats para un sin número de especies, hacen que esas zonas sufran un proceso de desertificación, tal y como lo explica la teoría de la bomba biótica: cuando se producen episodios de deforestación, disminución del número de plantas, de la evapotranspiración, degradación del suelo se ocasiona una reducción de las lluvias y degradación de la vida.


En todo nuestro planeta
Stiven Liévano y Adriana Torres registran que en los últimos meses los medios de comunicación y las personas están hablando y comentando mucho acerca de lo que se denomina el “cambio climático”.

Y es cierto, creen que se está tomando conciencia de que el clima es diferente y que cada vez más se están produciendo fenómenos meteorológicos extraños y radicales.


Citan referencias de fenómenos planetarios como las inundaciones, la aparición de nieves en lugares calurosos (por ejemplo Kenia), la aparición de enormes huracanes, el deshielo de grandes extensiones de los polos, los incendios forestales, el aumento del calor en los océanos, la aparición de fenómenos como el del Niño, la mayor actividad solar y el consecuente aumento de la actividad electromagnética de la Tierra, todo esto a causa del cambio climático.


Se acabaron las lluvias
Adriana Portela y Paula Segura, registran una situación similar en la finca en donde fueron aceptados: Se acabaron las lluvias, los cultivos se han secado, especialmente los de maíz y cachaco, que predominan en la zona… por lo cual las comunidades indígenas actualmente atraviesan una crisis económica bastante grande.

La falta de agua, se hace demasiado evidente en la población con las hambrunas, epidemias, incendios y desplazamientos de la población.

Credito
EL NUEVO DÍA

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