El departamento de Estudios sobre la Información del University College de Londres concluyó, luego de un estudio publicado en 2011, que Internet afecta la concentración de los jóvenes. Aunque antes de que Internet existiera, los adolescentes igual parecían bastante dispersos.

“En la adolescencia es difícil concentrase”, asegura la psicóloga Luz Adriana Pinto.

“Internet es sólo un foco más de desconcentración, pero la clave es que esta etapa tiene muchos retos que los jóvenes deben afrontar y que los mantienen muy distraídos”.

La psicóloga Sonia Arias, señala que “la edad adolescente es la época más conflictiva del ser humano, pues por una parte el adolescente trata de adaptarse a las demandas sociales tales como responsabilidad, ahorro, estudios y horarios, mientras que por otra parte el adolescente trata de satisfacer sus gustos y deseos de divertirse con sus amigos cuando se pueda, aunque sus padres quieran o no”.

Es por esto que el joven atiende durante el día diferentes estímulos que le quitan concentración y por lo tanto, es necesario usar uno que otro truco para recordar todas las actividades del día.

Usar la tecnología puede ser el primer paso y antes que perjudicar puede ser un aliado.     

Google, por ejemplo, tiene un interesante calendario virtual que recuerda los eventos importantes, así como Facebook tiene una aplicación que puede usarse para recordar los eventos especiales. Incluso, si se trata de hacer tareas en grupo, se puede crear, justamente, un evento para convocar a los amigos por medio de esta red social.

“Permiten, además, abarcar contenidos interdisciplinarios favoreciendo perspectivas integradoras en el aprendiz. En el caso de las computadoras, estas sirven como soporte para la ejercitación y la sistematización de contenidos (entrenamiento del aprendizaje memorístico), pueden ser medio para el aprendizaje heurístico, al ser utilizadas como medio para la investigación”, asegura, Roberto Rodríguez González.

LISTA
Consejos Prácticos
1 - Esfuérzate lo mejor que  puedas para hacer solamente una cosa a la vez: es difícil, pero si terminas primero con las tareas, tendrás más tiempo para resolver tus otros asuntos.
2. ¡Cambia tus hábitos! Si estás acostumbrado a dormir dos horas al llegar al colegio o a hablar con tus amigos un rato antes de hacer los deberes, prueba a terminar tus compromisos después de una pequeña siesta.
3. ¡Haz un “pequeño esfuerzo”, añade algunos minutos más! Puede ser difícil terminar un trabajo si tienes la mente en otra parte, pero antes de rendirte date un margen de 10 minutos antes de abandonar.
4. Anota lo que perturba tu mente. Si haces una lista de las cosas que tienes pendientes, tendrás la mente más clara.
5. ¡Aumenta tu motivación! Date un premio después de terminar una labor.
6. Precisa tus objetivos. Cumplir un objetivo por día sería genial para ayudar a tu concentración.
7. Divide tu concentración por secciones. Si tienes muchos temas pendientes, haz primero uno y luego otro en cortos periodos de tiempo.  
8. Aumenta tu rendimiento. Si antes dejabas todo a medias, prueba a dejarlo ¾ hasta que logres cumplirlo por completo.  
9. Quédate siempre atento. Si emprendiste una tarea, enfócate en ella.

Ejercicio de concentración:
• Elige un lugar tranquilo donde nadie te moleste, coge un reloj, lo colocas lejos de tus oídos pero lo suficiente para que puedas escuchar el tic tac de su máquina.
• Luego cierra los ojos y concéntrate en ese ruido el mayor tiempo posible, 50 segundos, 1 minuto, 2 minutos, tal vez al principio te cueste un poco más pero ten paciencia, gradualmente irás comprobando que tu poder de concentración irá en aumento.
• Piensa en el reloj y no lo apartes un instante de tu mente, piensa en su configuración exterior, luego ve a la constitución de su maquinaria, mira las piezas moverse, sin perderlo un momento.
• Es recomendable practicar este ejercicio por lo menos una vez al día. Podría ser un buen momento por la noche antes de acostarnos.

Tips
Cuando compruebes que no prestas atención trata de:
• Despejarte.
• Dar una vuelta.
• Hacer un ejercicio.
• Comer algo, etc.
• Luego vuelves a la tarea y lo intentas nuevamente.
• Evita comer mientras estás trabajando porque esto puede interrumpir el ritmo, sin embargo, darte unos minutos para merendar, puede resultar.
• Si tienes alguna duda, trata de resolverla primero antes de concentrate en tu próxima labor.
• Apaga el televisor y el celular es mejor tenerlo en modo “silent”.
• Facebook y Twitter pueden esperar, organiza un tiempo para actualizarlos.

LA VOZ DEL EXPERTO
Carolina Dulcey
Psicóloga
“Comprender a los jóvenes significa abarcar en la mente todos los cambios a los cuales ellos están sujetos. Sin que exista de por medio un diagnóstico por hiperactividad o TDH, la mayoría de los adolescentes se muestran distraídos con frecuencia y parece que tuvieran la cabeza en otro lugar. Confrontarlos usualmente genera en ellos estrés y presión. Resulta más eficaz darles unos tips y colaborarles incluso haciendo uso de tecnologías avanzadas para este fin, como los dispositivos móviles. Una buena forma de concentrarse es hablando con ellos sobre un tema particular. Los padres usualmente ejercen el control como policías, pero difícilmente logran atraer la atención del joven sobre un tema particular. Compartir sus propias experiencias cuando fue joven significa un esfuerzo importante para mantenerlos enfocados en una meta específica”.