RESUMEN AGENCIAS

La central nuclear de Fukushima registró ayer una nueva fuga de agua muy contaminada, lo que pone de relieve los desafíos que aún persisten en la planta para contener la situación casi tres años después del estallido de la crisis atómica.

La operadora de la planta nuclear, Tokyo Electric Power (Tepco), informó que la fuga fue de unas 100 toneladas y se produjo en uno de los mil tanques usados en las instalaciones para almacenar el líquido que refrigera los reactores, que se contamina al entrar en contacto con los núcleos fundidos.

El nivel de radiación del agua es muy alto, ya que contiene 230 millones de becquereles por litro de sustancias emisoras de rayos beta (principalmente estroncio 90), lo que supone el más elevado en lo que respecta a las fugas que han registrado hasta ahora estos tanques.