La llegada del año nuevo trae consigo la ilusión de ver en el ejecutivo a alcaldes, gobernadores, concejales y diputados, en su gran mayoría electos con la promesa del cambio, muchos de ellos representan la animadversión de una larga y atornillada etapa de grupos y caciques políticos, afincados en el poder, asociados con maquinaria política y algunos casos de corrupción, un reto desafiante para los elegidos, en la medida en que la gran mayoría ha estado siempre del lado político.
Ahora bien, pasar del proselitismo político al nivel directivo será su primera gran labor, desde el primero de enero tanto los mandatarios como sus nuevos equipos de trabajo deben de marginarse de la contienda y enfocarse en trabajar para hacer realidad todas las propuestas y promesas de campaña, no esperamos una campaña eterna entre ganadores y perdedores, tenemos la esperanza de que ustedes que representan al pueblo mediante una mayoría de votos puedan darle el rumbo a los municipios y al departamento, incluso con algunas limitaciones financieras y jurídicas.
Aunque aclaro, no es tarea fácil. Un retraso en el inicio de sus labores puede ser contraproducente para su imagen y popularidad, les recuerdo que estamos en la era digital y que todos queremos resultados ya, ejemplos tenemos, el actual mandatario de los colombianos paso de la gloria a los más bajos índices de popularidad en menos de un año a cuenta de decidir mantener una contienda, de la falta de carácter y de la poca capacidad para poner en marcha sus propuesta.
Entonces solo me resta a través de este medio y en calidad de elector pedirles señores mandatarios y dignatarios que nos devuelvan la esperanza, es lo mínimo que esperamos de ustedes, votamos por sus propuestas, apoyamos sus proyectos en campaña, creímos en ustedes y en sus capacidades, muchos le apostaron al cambio y eso es lo que ustedes representan, es lo mismo que representan nuestros votos; por ello es hora de empezar a trabajar, de mostrar su plan de acción y de distanciarse de todo idealismo popular que lo condujo al poder. Seguro que la capacidad de ejecución que ustedes señores mandatarios y sus equipos demuestren, será la mejor carta de presentación para futuros campañas.
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