Asímismo, al exsecretario de Planeación, Mario Portela Sánchez, por el daño patrimonial derivado de la construcción de un escenario deportivo y cultural en dicho municipio.

Por un lado, la entidad indicó que la construcción de los camerinos y baños, por un valor de $51.8 millones, quedó inconclusa y afectan la funcionalidad del servicio que debe prestarse a la comunidad. Los exfuncionarios, a través de su abogado, controvirtieron el señalamiento indicando que el escenario estaba siendo empleado para la realización de actividades propias de la comunidad.

Además, la Contraloría refirió que se pagó un mayor valor de $8 millones al incluir el análisis de precios unitarios dentro de diferentes ítems del contrato como prestaciones sociales al 95%, un valor que no fue justificado ni soportado y, además, va en contravía de lo establecido en la normatividad laboral colombiana.

Los exfuncionarios aseguraban que el contratista de la obra es el único responsable por aspectos contractuales y la adquisición de materiales, entre otros.

No obstante, la Contraloría ratificó como responsables fiscales a los exfuncionarios mencionados por falta de planeación que dejaron en estado de abandono la obra.

El año pasado Escobar intentó llegar de nuevo a la Alcaldía, pero quedó en segundo lugar, por lo que ocupa una curul en el concejo.