Su nombre es Logia Estrella del Combeima Número 7. Se hizo llamar así la clandestina organización de masones, que desde el 2 de agosto de 1930 ha hecho presencia en Ibagué. 

El 7, número que aparece en su nombre oficial, se debe a que fue la séptima logia constituida en el país. Un reconocimiento que los maestros y hermanos masones, como se hacen llamar, no han desconocido en los 84 años de existencia.

Pero, ¿sabía usted como ibaguereño que en la ciudad existía esta logia? ¿sabía qué es la masonería y cómo esta ha prevalecido a lo largo de la historia en total discreción y reserva? Pues bien, EL NUEVO DÍA logró hablar con algunos masones, quienes nos dejaron entrar a este mundo de las logias poco conocido, y que en más de uno causa cierta curiosidad por saber de qué se trata.

Un paneo a la historia

Logia Estrella del Combeima empezó a escribir su historia con 29 hermanos. Fue llamada así por el río Combeima y sus fundadores fueron importantes personalidades públicas masonas como el exgobernador del Tolima, Mariano Melendro;  el filántropo Luis A. Rengifo: Rafael Díaz Martínez, funcionario en el gobierno del presidente Benjamín Herrera; Manuel de la Pava, padre del recién fallecido abogado y escritor Simón de la Pava y otros.

Y ¿qué es en sí la masonería? Esta es una organización conformada por personas seleccionadas, no solo por su intelecto, sino por sus condiciones morales y sociales para la construcción de hombres libres. “Es una entidad más de selección y calidad de sus miembros que de cantidad. No andamos buscando militantes en ninguna parte”, dijo en su momento uno de sus integrantes.

Los fondos para el funcionamiento en su momento fueron de 12 pesos, que según el maestro masón Albeiro Yepes, equivalía a una res cercana a los dos millones y medio de pesos. En sus primeros años de vida, la logia funcionó normalmente en lo que hoy se conoce como la panadería Dulima, enseguida del Palacio municipal.

Tuvo sus trabajos en los sótanos del Teatro Tolima, en una garaje situado en la calle 13 entre carreras Primera y Segunda y luego en la época de bonanza, en el segundo piso de una casa ubicada en la calle 11 con carrera Tercera donde funcionó el establecimiento Café Niza.

Después de tantos ires y venires, apareció en la urbanización La Macarena y el dueños de los lotes, el médico oftalmólogo Carlos Mazuera donó el lote donde desde 1967 está establecida la Logia Estrella del Combeima. Hoy son 30 hombres los que integran la logia en aras de seguir construyendo, según el maestro masón, hombres libres.

El poder, la política y la masonería

Muchos ibaguereños no saben que esta logia ha sobrevivido a la diversas persecuciones por parte de la iglesia y de la misma violencia bipartidista de hace algunos años. Pero hombres de todas las esferas de la ciudad se congregaron alrededor de la masonería y lograron consolidarla a lo largo de los años.

Tanto que la época de finales de los 40’ y los 80’, fue la época de esplendor masónico para la logia. Varios masones ocuparon puestos importantes en la rama judicial, en los gremios económicos de la ciudad, Cámara de Comercio, Comfenalco  y gerencias de seguros. También en el sector público en la Contraloría Departamental, secretarías del Tolima y el municipio, en el Imat y en el Instituto de Crédito Territorial y no faltó el trabajo para quienes ejercían la ingeniería civil.

Incluso, el maestro masón Albeiro Yepes reconoció que cuando Alberto Santofimio era el principal caudillo del liberalismo, hubo repartición burocrática. 

Sabía usted que...

- El sábado 2 de agosto de 1930 fue constituida oficialmente la logia de los masones en Ibagué.

- Que la masonería no es una religión, un partido político o una ideología.

- Que los masones se agrupan en logias y tiene tres grados fundamentales que son el de aprendiz, compañero y maestro.

- Que aunque en 1930 nació la logia Estrella del Combeima, para el año 1850 florecía la más importante logia en Ambalema, bajo el mandato de Tomás Cipriano de Mosquera y posteriormente en Honda, ellas se extinguieron cuando sus integrantes fueron emigrando hacia otros lugares.

- Los chaparraluno Manuel Murillo Toro y Darío Echandía fueron masones.

- Hay un cuadro directivo, está el presidente, el secretario, el orador fiscal, el viceministro; elegidos por votación.